<p>William Christie será el encargado de dirigir Les Arts Florissants con un reparto joven proveniente del prestigioso Jardin du Voix.</p>
- La historia cuenta las vicisitudes y los debates internos de la reina Partenope, fundadora de Nápoles, en la aventura de elegir marido. Intrigas, estrategia e identidades erróneas revelan verdades profundas sobre el amor y la guerra
- Partenope es una de las pocas óperas del repertorio del compositor que evita el drama trágico y que apuesta por el humor
- En una obra llena de arias de bravura, William Christie será el encargado de dirigir Les Arts Florissants con un reparto joven proveniente del prestigioso Jardin du Voix (ganadores de la edición 2021)
- En el papel principal de Partenope habrá Ana Vieira Leite y sus pretendientes serán interpretados por el contratenor inglés Hugh Cutting (Arsace), Alberto Miguélez Rouco (Armindo), el tenor Jacob Lawrence (Emilio) y la mezzosoprano Helen Charlston (Rosmira, Eurimene). Matthieu Walendzik cantará el papel de Ormonte
- La combinación de experiencia y juventud, el encuentro entre el rigor y la frescura, entre el conocimiento y la alegría hacen de este concierto una propuesta excelente para una obra tan deliciosa como Partenope
- Partenope tiene el apoyo de EY
Barcelona, 26 de enero 2022. El próximo 29 de enero, llega por primera vez al Gran Teatre del Liceu la ópera Partenope de Georg Friedrich Händel con una versión concierto a cargo del reconocido director William Christie y Les Arts Florissants.
Händel estrenó su primera ópera en Londres en 1720, tras haber probado fortuna en Italia, y gracias a sus dos mayores talentos –su genio como compositor y su acierto para intuir los gustos del público– contribuyó decisivamente a que el nuevo arte fuera una gran sensación en Inglaterra. Durante más de 20 años, Händel compuso y estrenó óperas, y la mayor parte de su repertorio se ciñó al género principal de la época: la ópera seria, grandes dramas inspirados en los héroes, los conquistadores y los dioses antiguos. Pero también hizo alguna incursión en el género menor, la ópera cómica o bufa, aunque sin renunciar a que sus personajes fueran reinas, príncipes y guerreros. Lo hizo en su etapa italiana –Agrippina, de 1719, es una comedia de enredo en tiempos del emperador Nerón–, y volvió a repetir la fórmula en 1730 con Partenope, una historia ambientada en tiempos míticos en la que la trama gira alrededor de un enredo amoroso entre cinco personajes.
La reina Partenope, fundadora de Nápoles, se deja querer por cuatro pretendientes: uno de ellos, Armindo, ama a la reina de verdad, pero ella lo desprecia porque opta por Arsace, que busca desquitarse a través de ella del fracaso de su relación anterior con Rosmira. A la vez, aparecen Emilio, un rey rival que declarará la guerra si Partenope no accede a la boda, y Eurimene, un misterioso príncipe. La clave del enredo está en Eurimene, pues en realidad es Rosmira disfrazada de hombre, que ha ido hasta Nápoles para recuperar el amor de Arsace. El desarrollo de la ópera gira alrededor de equívocos y enredos, pues nadie renuncia a sus objetivos amorosos, que nunca son coincidentes. La solución del embrollo es igualmente disparatada. Tras muchos líos y una guerra, el final de la historia consiste en un duelo por el amor de Partenope: Arsace debe batirse con la espada contra Eurimene, habiendo descubierto mucho antes que realmente es Rosmira. Antes de enfrentarse, acepta que vuelve a amarla y que no quiere hacerle daño; para evitar el duelo, pide que luchen a pecho descubierto, lo que obliga a Rosmira a desnudarse y revelar su identidad como mujer. Resuelto el engaño –que en tiempos actuales, donde tanto se habla de género fluido, resulta particularmente relevante–, se forman las dos parejas definitivas: Arsace y Rosmira se aman, y Partenope acepta a su fiel amante Armindo. Emilio renuncia al amor a cambio de la paz.
Partenope es Händel estado puro, trepidante, melodiosa, salpicada de arias chispeantes –algo más breves de lo habitual, con tendencia al virtuosismo moderado. Es una obra escasamente interpretada, pero con una música cautivadora y un librito encantador, un delirio de creatividad. William Christie será el encargado de dirigir esta versión en concierto con un reparto joven proveniente del prestigioso Jardin du Voix (ganadores edición 2021). El maestro, experto handeliano, realizará una construcción de esta obra maestra captando las miradas y las sonrisas que hay ocultas en la partitura y transformando las notas en sustancia dramática.
En el papel principal de Partenope estará Ana Vieira Leite, una joven soprano portuguesa, y sus pretendientes los interpretarán el contratenor inglés Hugh Cutting (Arsace), el gallego Alberto Miguélez Rouco (también contratenor, su rol será el de Armindo), el tenor australiano Jacob Lawrence (Emilio) y la mezzosoprano inglesa Helen Charlston (Rosmira / Eurimene). El barítono franco-polaco Matthieu Walendzik cantará el papel menor de Ormonte.
Uno de los momentos musicales clave tiene lugar en el primer acto con Io ti levo l’impero dell’armi. Se trata de una aria da capo, escrita expresamente para soprano, y en el estilo de moda en la época –el mismo que cultivaban con éxito compositores de moda como Porpora o Vinci–, aunque con ese toque de sobriedad y fluidez pausada que Händel imprimía a sus piezas lentas.
En el segundo acto, Partenope interpreta Qual farfalletta gira a quel lume, una aria fresca, orquestación sobria y elegante. La parte vocal es una de las más airosas de toda la ópera, pensada para que la soprano disponga de un rotundo momento de lucimiento personal, sobre todo en el regreso a la melodía primera, que permite todo tipo de adornos virtuosos.